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Ira

Son esos momentos de mucha furia

Cuando te sientes muy incomprendido

y sin saber muy bien el cometido

Te llena el poder y energía.

 

Y nunca conseguirás lo que quieres

ya que la furia te va a corromper

ya que sin poder del todo comprender

siempre te fijas en lo que mas prefieres,

 

pero ante todo no te controlas

y sin muchas más complicaciones

lo verás como una gran pistola

 

gatillo y preocupaciones

pero ves esa maldita pistola

la ira va sin complicaciones.

Capítulo-89:El Big Bang

En un pueblo de La Mancha de cuyo nombre no quiero acordarme vivía Alonso Quijano, un anciano adicto a la serie Big Bang Theory, el pobre de Alonso dejaba de lado sus asuntos de nobleza enfrascandose de lleno en ver la serie a todas horas, de tanto ver la serie el pobre condenado quedó loco de la cabeza pensando que era un físico y amante de los comics.

A tal punto llegó su locura que incluso hablaba como los protagonistas y se vestía como Sheldon Cooper. En una de esos dias de locura, Alonso Quijano decidió cambiarse el nombre a Howard Quijote y emprender un viaje a la Comic-Con de Pasadena. En su camino a la Comic-Con el recientemente renombrado Howard Quijote «reclutó» a un acompañante llamado Sancho Panza, el cual era consciente de la locura de Quijote, decidió acompañarle para que él no cometiese ninguna estupidez. Tras varias semanas de viaje (según dijo Quijote lo haremos en nombre de Spock) en Burro y Barco, los cuales tenían un «disfraz» de naves espaciales, los dos compañeros llegaron a Pasadena, tras buscar una persona que no se alejase por lo ridículo que era ir subido en un burro con disfraz de nave espacial Quijote preguntó:

-Usted, forma de vida inferior ¿sabría decirme con su poco coeficiente intelectual, dónde se encuentra la Comic-Con?

A lo que el transeúnte responde:

-¡Qué diablos intentas decir c@&*on!.

-Perdone, pero… ¿acaso yo le he insultado? Solo he dicho que si me podría decir dónde está la Comic-Con, ni que hubiera dicho que su coeficiente intelectual es equivalente al de un mosquito.

Tras oír eso, el transeúnte tiró a Quijote de su «nave» espacial y empezó a apalearlo de tal manera que el pobre de Quijote quedó inconsciente. Tras varias horas en el hospital Quijote despertó y volvió a recuperar la cordura dándose cuenta de que ni la física ni los comics le gustaban así que decidió volver a La Mancha y recuperar su antigua vida.

En lo que Sancho dice:

-¿Y yo qué pinto en todo esto?

Tras decir eso el universo estalla provocando una grieta interdimensional que acabaria destruyendo su dimensión actual.

Lo que les avecine a nuestros protagonistas está ahora en manos del destino pero eso lo veremos en el siguiente episodio de The Quijote Theory.

Cómo Lázaro se asentó con un panadero y de las cosas que con él pasó

Tras largo tiempo habitando en las calles de Ciudad Real, viviendo de las limosnas y los hurtos que eran el pan de cada día, di con la oportunidad que me abrió las puertas a la morada de un panadero, y juro sobre la tumba de mi difunto padre que en paz descanse que nunca vi hombre tan mezquino, mentiroso y arrogante, que me trataba como a las ratas y me maltrataba como si fuera un trapo viejo pero que a pesar de ello no me hacía pasar mucha hambre y nunca que yo recuerde saboreé mejor pan en toda mi desdichada vida.

Yo me presenté en su puerta diciéndole que sería un honor para este joven poder ayudarlo en su noble tarea y así, a cambio de un lugar en el que reposar durante un tiempo, él respondió afirmativamente  pero con una cara de desprecio y odio que no se le borró hasta el último día. Yo entré al servicio de mi nuevo amo, el cual,  se llamaba Rupento Hernández, haciendo pequeños recados entregando pan y otros alimentos que normalmente en el tiempo en el que salía de la panadería y andaba por las callejuelas tan  solo llegaban la mitad, las gentes preguntaban por qué había tan poco y yo respondía mintiendo que los tiempos que llegan no son muy buenos e incluso el más rico panadero tiene que sufrir los perjuicios de la crisis. Con mucha suerte la gente no preguntaba más y yo salía ileso de golpizas que solía darme Rupento, además de los recados solía pasar tiempo cerca del horno el cual calcinaba mi piel al estar tan cerca de él, por la noches solía dormir encima de las bolsas de harina y maíz que, aunque era cómodo, pasaba un poco de frío, las mañanas eran ajetreadas y entre golpes y reprimendas de parte del viejo panadero era capaz de vender pan, al mismo tiempo que sangraba. La vida con él era mala pero a veces me enseñaba como cocinar distintos tipos de alimentos de manera muy sencilla, lo cual me ayudó bastante en un futuro pero lo bueno nunca duraba ya que un día descubrí un alijo en el que el panadero guardaba el dinero que sobraba de los pedidos de harina y maíz, yo cogí la bolsa y la sustituí por una bolsa en cuyo interior había piedras.

Una noche en la que yo dormía profundamente el panadero fue a comprobar su alijo y se llevó una sorpresa al comprobar que en su interior había piedras y no la buena suma de dinero que yo había hurtado, nunca vi a un hombre gritar de tal manera que despertase a toda la villa, tras intuir que yo era el responsable fue hacia el rincón en el que estaba acomodado y se dio cuenta que no había nadie ahí, yo ya me había ido intuyendo lo que pasaría.  Yo corría por los campos con la bolsa llena de dinero que me serviría para sustentarme durante un tiempo.

Y así fue mi historia con Rupento Hernández, un ruin panadero que vio cómo el maltratar a un niño le salió más caro de lo que pensó.

 

Copla a la muerte de su abuelo

Él sí era un buen hombre ,

vivió en otra época,

y sin pausa,

se convirtió en un hombre,

y con bastante ética,

vio, sin pausa,

la vida de un gran hombre,

que nunca se equivoca,

él me cuenta

cómo nunca pasó hambre,

usando bien la cabeza,

y destreza.


 

 

 

 

 

 

 

 

Noriega el magnífico

En la comodidad de su hogar Alejandro reposaba:

jugando al Fifa que poco se preocupaba.

De pronto, alguien en la habitación entraba.

Era su fiel compañero Gonzalo que preocupado lo llamaba.

«¡Noriega, rápido!» mientras el chico jadeaba.

«Descansa amigo y nárrame que tanto te preocupaba».

«Un gran mutante arrasa el pueblo, la gente os reclamaba»

Muy rápido el equipo preparaban pues el tiempo se les agotaba.

En marcha a la plaza Alejandro y Gonzalo muy veloces esprintaban.

Ahí, frente al supermutante que con furia balbuceaba.

Noriega, con las fichucas, al monstruo mareaba

Mas Gonzalo con piquetas su espalda escalaba.

después de una escalada con un cuchillo su ojo arrancaba.

Mientras el monstruo gritaba, de un salto, Noriega su cabeza cortaba.

Con las fuerzas agotadas, en el pueblo, la victoria se celebraba.

Vaca espacial

Un día como cualquier otro él se encontraba nadando en la ventana de mi vecino cuando recordó que me dejé el gato en el microondas, así que te deslizaste sobre las numerosas cuchillas que había en la calle y de un salto llegué a casa, ahí cogiste a mi gato moribundo y lo metió en el horno, pensando que ahí estaría mejor, un ornitorinco naranja se acercó a él, se levantó y me dijo «vamo a calmarno», cogió una almohada de clavos y se la intercambió a Don Pepe, el de los globos, por una colección de pelos de mono recién extraídos.

El avión del señor Pepín era bastante bonita así que cogí una motosierra y le corté el pelo al primer árbol que pasó por la nube, como él era una cebolla no podía alcanzar el libro de la estantería del suelo, así que me di media vuelta y me subí a mi triciclo volador, submarino del espacio, conquistador de mundos y se largó a Centro-África. Esa misma tarde en tu casa activaste el ventilador para poder airear mi planta bailonga, después de revisarle la dentadura con un destornillador consiguió chutar el balón  y mandarlo a Corea del Norte donde provocó una guerra interdimensional. Indiana Jones se dispuso a echarle un pulso a Han Solo donde yo gané la carrera.





 


 

 

 

Noti cuento 1B Gonzalo

Era una tarde de primavera y un policía del Bronx (NY) llamado Mike, patrullaba las calles como cada día.

Era un tipo muy desconfiado y siempre sospechaba de todo.

Divisó a lo lejos un coche aparentemente en buen estado pero a medida que se iba acercando vio que tenía un faro roto y el retrovisor colgando. Se acercó al coche y golpeó con los nudillos en la ventanilla, cuando el conductor bajó la ventanilla, Mike descubrió que el conductor era un joven afroamericano  llamado Charles.

Le pidió la documentación del coche  y este muy amablemente se la dio y comprobó que todo estaba en regla. Posteriormente,  le obligó a salir del coche, y  le enseñó los desperfectos del mismo.

Charles asintió con la cabeza y le dijo que tenia pensado ir al taller, algo que a Mike no lo convenció, el chico  se dio cuenta de eso y echó a correr.

El policía sin pensárselo desenfundó la pistola y sin decir palabra le disparó, Charles cayó al suelo abatido por los disparos.

No se  pudo hacer nada por su vida ya que murió al instante. Mike  analizando la situación se dio cuenta del error que había cometido y decidio abandonar el lugar de los echos.

Asustado se metió en el coche patrulla y puso rumbo hacia ningún lugar.

Nunca más se supo de él.

Fin

Por Gonzalo Fernández Ramos

 

 

Adivina Adivinanza 1B Gonzalo

El nunca de ordenar y procesar va a cesar,

tú siempre su ayuda vas a buscar,

por una ventana puedes entrar,

apagado o encendido lo puedes dejar.

Adivina adivinanza cual será.

 

(Es un ordenador)